jueves, 28 de febrero de 2013

Para entrenadores, niños y padres…

Hace poco leí un excelente artículo en la revista Fútbol-Táctico en donde el entrenador de fútbol base, Chico Cabrera, hacía hincapié en la formación pedagógica de los niños en el juego. Este entrenador de Málaga, resalta lo bueno de lo malo y nos deja un lema como moraleja, sin más preámbulos con ustedes la nota.

EDUCAR VALORES A TRAVÉS DEL FÚTBOL
En este artículo hablaré sobre el fútbol base, sobres esos niños que a su corta edad quieren emular a sus ídolos futbolísticos a pesar de su temprana edad y su inocencia. Son ya varios los años que llevo dedicado al fútbol de iniciación y no lo cambio por el de la alta competición, me gusta enseñarles y ver la cara que ponen cuando les enseñas a darle por vez primera con el interior del pie, y cuando les digo con que se da el pase y todos responden dándose golpeteo en el pie... con el interior. Y les digo “muy bien” y la sonrisa les sale de oreja a oreja, una sonrisa verdadera. Esos momentos, realizando su primer entrenamiento, buscando a sus padres en las gradas, para ser cómplices de una mirada de felicidad.
El entrenador educador a estas edades suele ser una gran influencia en los niños, es por ello que debemos de estar bien preparados para asumir tan importante misión a la hora de dirigir un equipo de fútbol, tanto en el apartado psicológico como en la  preparación de los conocimientos de fútbol. Porque suelen indagar mucho y buscan respuesta para todo.
Los niños de 6 años, no nos confundamos, no son Messi, ni Cristiano Ronaldo, ni Casillas,  ni Xavi, ni Iniesta, son niños que quieren jugar a divertirse, a evadirse de su entorno y ven en el fútbol una manera de divertirse junto a sus amigos, ser parte importante de un equipo y representar a su barrio, ciudad o pueblo. Pero para conseguir todo esto es muy importante que el entorno futbolístico que rodee al niño sea sano, educado y respetuoso, y seamos entrenador-educador modélico.
Pacientes con los niños que a veces nos sacan de nuestras casillas, pero no olvidemos nunca que son niños, y que nosotros lo fuimos. Hay que ser comprensivos con ellos, cariñosos, que vea en nosotros no una persona autoritaria sino un amigo que le ayuda a ser persona en el día a día. En los entrenamientos es muy importante tener una disciplina porque es la base del respeto mutuo. Una de las cosas que hago en los primeros días de entrenamiento es poner las normas disciplinarias para el equipo y la elaboramos entre todos los niños que pertenece al equipo y cada uno dice una frase y las ponemos en una cartulina en el vestuario y después las firmamos entre todos y créenme que funciona, de esta manera si alguno la incumple ya no es mi norma sino la de todos.
Pero recordar que el primero que tiene que dar ejemplo es el entrenador, siendo puntual, estar debidamente uniformado, dando ejemplo en  todo momento,   pues somos el espejo en el que ellos se miran y todo nuestro gesto, nuestro vocabulario, nuestro comportamiento, lo copiaran. En  los  partidos  es  muy  importante  citarlos  a  su hora, para mí personalmente  la puntualidad es muy importante,  ir  con  la  ropa  del  club,  hablar  con  ellos sobre el partido lo preciso. Nuestro comportamiento ha de ser ejemplar y cuidar cada  uno  de  nuestros  gestos,  tanto  con  el  árbitro como  con  el  equipo  rival.  En  estos  años  he  visto entrenadores de muchas clases. A  veces  indignado  y  avergonzado  por  la  manera de  tratar a  los  chicos de  su equipo,  sin  respeto  y a veces  los  niños  de  su  propio  equipo  sintiéndose avergonzados por el comportamiento del entrenador, sin  respetar  al  árbitro,  al  entrenador  rival  y  lo  que es  peor,  no  tener  sensibilidad  con  los  niños  del equipo  contrario,  y a esas personas deberíamos de denunciarlas y quitarles de un equipo de fútbol.
Hay  que  educar  en  valores,  y  saber  perder,  porque de las derrotas se aprende y mucho, y al terminar el partido saludar a los niños del equipo contrario darles la mano y decirles palabras afectivas, nos devolverán una sonrisa y eso vale mucho. Saludar al árbitro y al entrenador contrario aunque se haya perdido. Son pautas que hay que seguir por el bien del niño, por el bien del fútbol.
Los padres, parte fundamental de este engranaje que es el fútbol base, que hay que atribuirle el sacrificio de tener que hacer, a veces, milagros para que sus hijos vayan a los entrenamientos y al partido. Pero a veces su comportamiento deja mucho que desear y no son un ejemplo para sus propios hijos.
Los  padres  no  deben  de  ser  egoístas  y  criticar  al entrenador cuando su hijo no juega o cuando ha sido cambiado por otro  jugador.   Tampoco deben gritarle y pegarle léxicos, porque eso a ellos  les humilla y se sienten  avergonzados  y  a  la  larga  dejará  el fútbol. No nos creamos que tenemos un Messi con solo 10 años, en el  fútbol hay que  ir paso a paso, poquito a poco. Hay que crear  un grupo de amigos antes que un  equipo  de  fútbol,  una  armonía  donde  el  niño  se sienta parte importante y protagonista absoluto. No queremos padres barras bravas que  creen malestar en  nuestros  grupos  de  niños,  queremos  padres que se preocupen de su hijo y cuidarlo y si ese día de un partido cualquiera, no le salen las cosas bien, que el padre  sea el primero en aliviarlo  y  subirle  la autoestima, que tenga confianza con él, por su bien. Porque juntos en conexión entre padres y entrenador haremos una familia y sacaremos lo mejor que lleva el niño. Nosotros, los entrenadores, debemos permitir tratar a todos los niños por igual ya jueguen mejor o peor y ese comportamiento se lo debemos reflejar a ellos. Porque no hay un ser más  inteligente que un niño aunque a veces no nos damos cuenta de ello y lo peor es que lo sufre por dentro. Todo esto forma parte de mis años de experiencia en el fútbol de escuela. De trabajar en la liga educativa de la diputación de Málaga, que me han inculcado su gran  lema que es: ‘Educar en valores’. Valores que le han de  servir al niño en un  futuro no muy  lejano y  crecer  a  base  del  deporte  en  una  sociedad  cada vez más  cambiante  a  la  de mi  edad. Unos  valores de  respeto mutuo, de  tolerancia y disciplina que día a día nos  irá haciendo mejor persona  y aprovechar el impulso del fútbol como puente hacia un bienestar mejor.
Un Saludo .Chico Cabrera.
Artículo publicado en www.futbol-tactico.com - Autor: Chico Cabrera (Entrenador de fútbol)

1 comentario:

  1. Cuanta verdad pollo! Esta bueno que lo subas para que todos puedan leerlo.. Y asi cada uno de nosotros, desde el lugar que le toque, tratar de que esto sea posible.. El dia de mañana nos lo agradeceran los que hoy son NUESTROS niños.. Un abrazo para todos! Lucas.

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