Vilo sin jugar bien se impuso por 2 a 1 ante Roma F.C. Los goles los marcaron Sáez y Matías Ciaramella. La actuación de Salvati fue determinante para sumar de a tres.
En el reducto Vilo recibía a Roma F.C. por la novena fecha del torneo apertura. Para ello su técnico situaba en cancha a los siguientes once jugadores. Salvati, Arrieta, Vega, Caneda, Saggio, Cura, Chivilo, Sáez, Irigaray, Conde, M. Ciaramella.
El fútbol se puede ver, observar y analizar desde muchos puntos de vista, y seguramente entre todos encontremos el punto justo de equilibrio. Por ejemplo; esta el hincha, que acude a ver un equipo a verlo ganar; o el espectador que va a seguir un partido, a ver jugar. Son dos posiciones bien definidas, con disimiles predisposiciones para juzgar los mismos hechos. Dos posiciones muy difícilmente conciliables. El sábado el verde y blanco, en lo que a su funcionamiento como equipo nos referimos dejo diferentes interpretaciones. Lo que si podemos garantizar es que acento mayor satisfacción sobre el hincha, que en el ansioso espectador.
En su charla previa Montoya solicitaba ser un equipo agresivo; ”para ello Lucas Vega sobrara en el fondo, Caneda presionara unos metros más adelante al enganche mientras los laterales jugarían encima de los dos puntas sin progresar pos sus banda. Nuestros primeros defensores son Nacho, Fer y Matías a partir de ahí hay que recuperar el balón para luego jugar…”
1.- En un campo atroz el esférico rodaba, dando inicio a la primera etapa. El local comienza bien, Vega sobrando en el fondo, los laterales sobre los delanteros, Caneda persiguiendo al creador, el mediocampo parado en terreno ajeno y los tres puntas siendo los primeros defensores.
2.- Las situaciones de peligro llegan de inmediato. Dentro del área el “verdugo de adjetivos” baja de cabeza al balón para la arremetida del “Profe” Chivilo quien remata de derecha para que esta de en un defensor y queda bollando en los pies de Nacho “El grande” que hace apoyo nuevamente sobre el “Profe”, quien remata apenas afuera. El arco de Roma se salva providencialmente. A continuación Juan Sáez juega pegado a la raya, de wing izquierdo, desborda para sacar el centro. Nacho anticipa a la defensa definiendo de primera, la caprichosa se va un metro afuera. Si Vilo no se distrae y continua aferrado a esta idea el gol estará pronto a caer.
3.- Los jugadores son la táctica entre sí, Vilo agobia a su par. Juega 30 minutos sin sobresaltos. Lo pierde Ciaramella y luego el guardameta Romano se luce heroicamente ante un rebote de un centro que proviene de los pies de Nacho “El grande”, enviando al balón al córner. Minuto 33, minuto de quiebre. El juvenil Sáez estrella su remate de cachetada en el travesaño. Nada será como entonces. A continuación “El pitbull” Arrieta ve la amarilla, síntomas de cambio…
4.- Fin de fiesta, baile y presión. Vilo se desentiende, se mete en el atasco que le propone Roma intercambiando un par de piezas. Se transforma, desnaturaliza, histeriza y se vuelve irreconocible. Salvati aparece en tres oportunidades para prevalecer el cero en su arco. Vilo parece perder la templanza de tanto ir y no conseguir encajar en arco rival. La primera etapa culmina.
5.- Enojado Montoya toma la palabra para poner en vereda a sus dirigidos;” A ver muchachos vamos a empezar por poner clara las cosas, se lo digo una vez y se lo voy volver a decir hasta que me canse y me vaya. “¡Acá el técnico soy y lo que digo yo es lo que se hace!”… “El partido es muy simple”… “¡Necesito que estén encima de ellos para recuperar el balón y jugar! ¡Si no siguen las marcas nos desordenamos en defensa muchachos! El tirón de orejas duro poco más de siete minutos, con una vos cuasi Maradoniana, por la fuerza establecida en la expresión, el técnico resumía, “muchachos esto es un equipo, cada uno tiene que cumplir una función si uno me afloja el equipo se hunde;…es así de simple, cada pieza en su lugar…”
6.- La parte final comienza. Con el marcador igualado en cero a Vilo le queda persistir y corregirse, la concentración del conjunto será el dilema. Atacar bien significa defender bien. Vilo falla en ofensiva. Roma, como busca el agua la sed, perseguirá las huellas de su codicia. Pregonara sus contragolpes. Promediando los cinco minutos el eterno Salvati mana a mano con el delantero Romano salva una vez más la caída su valla.
7.- “El profe” se equivoca en la entrega. El suave vendaval atraviesa el placar. Tras un bombazo descomunal de su jugador nº 14. El balón infla la red del arco haciendo estéril el esfuerzo del uno. Los romanos merecidamente se ponen arriba en el marcador.
8.- Momento de incertidumbre. Vilo tendrá que revertir el resultado, la pregunta es cómo. Por otro lado Roma en defensa de su resultado tendrá que tomar un papel protagónico, el interrogante es el mismo.
9.- Al conjunto de Vicente López le toca aplicarse a una realidad que no imaginaba; “Si no puedes volar, corres; si no puedes correr, andas; y si no puedes andar, gateas”. La nerazzurri es endeble en su nuevo rol por lo pronto no hay soledad que aguante el envión...
10.-En el menor descuido “el Profe”, pide disculpas por su grosero error asistiendo solemnemente al juvenil Sáez quien adormecerse a la caprichosa en su botín izquierdo para luego sentenciar lacónicamente el uno iguales.
11.- La dupla técnica realiza la primer variante ingresa “El Bufalo” Fede se retira Nacho el Grande”. Tocado en su amor propio el verde y blanco juega al golpe por golpe. El neófito Roma se reflejada en el rezongo de una jugada que no es, y sí es, ya está, no se cobro. Impulso antiguo y sutil para encajar directamente en la tesis del “casi” y del “pero”. Propiciando a su adversario que saque sus frutos. De contra, “El Pichichi” Ciaramella tendrá su corrida, la de todos los tiempos, ese eslalon dejando obstáculos por el camino para verse las cara con el guardameta rival y hacer injusticia en este caso fusilando por medio de un zurdazo colosal al uno Romano. Vilo lo da vuelta, como en Regatas, como contra UBA. A este equipo no se lo puede dar por muerto aunque ande gateando por la cancha.
Y 12- Protegida en su coraza, el conjunto de Montoya sale airosa del evento, sin alharacas ni nada destacable salvo el resultado, lo que no es poco para un equipo que a los 15 del segundo tiempo parecía bordear el abismo.
Vilo encontró aire con un recurso que no suele utilizar mucho pero que es muy útil cuando se encuentra en un escenario como el de algunos tramos del encuentro del día sábado: el juego directo. Sáez y Matías Ciaramella fueron receptores profundos de dos balones largos. El primero es un gran pase entre líneas de Chivilo y minutos más tarde Ciaramella logra decretar el 2 a 1 por medio un contragolpe que nace desde el arco de Salvati.
Antes de mencionar la figura del partido quiero resaltar la actuación de Cristian Arrieta. “El Pitbull”, perro de caza, sinónimo de esfuerzo. El hombre que venía relegado en su puesto nuevamente tuvo una actuación destacada.
La figura del encuentro fue el eterno Salvati sus intersecciones tanto en el final de la primera etapa como las del segundo tiempo fueron vitales para que el equipo se llevara los tres puntos. El enorme Gabriel paraliza el tiempo, con sus atajadas.